En otoño los colores del faedo son espectaculares y eso que aún se ve mucho verde. Dentro de una semana o diez días estará de ensueño. Ayer, domingo, parecía que se celebrase alguna romería por allí. Fueron muchísimas, muchísimas, las personas que pasearon y disfrutaron del paisaje y del día auténticamente veraniego. En los pasos estrechos teníamos que esperar a que se despejara el camino porque no cabíamos todos. Había muchas familias con niños que lo pasaron genial, animales de compañía, grupos de jóvenes, de mayores, en fin, excursionistas de todas las edades. A la hora de comer el merendero estaba ocupado al completo y otros se acomodaban en la pradera.
Lo que me dio pena fue ver el río casi seco por no decir seco del todo. Pero también está guapo.
Para los que quieran dar un descanso y una alegría a los sentidos y ver los milagros que en la naturaleza se producen, aun están a tiempo de contemplarlo.
Desde León es casi un paseo, y la excursión es muy fácil de hacer. Merece la pena.
No comments:
Post a Comment